Dónde comer en París

Comer en París puede ser tan mágico como ver la Torre Eiffel brillar por la noche... o tan decepcionante como una omelette sin alma en una terraza turística. Yo pasé por ambas. La ciudad es un paraíso culinario, pero también una trampa para los desprevenidos. Por eso, esta guía no solo busca recomendarte dónde comer en París barato, sino también contarte qué descubrí tras caminar con hambre, pocos euros y mucha curiosidad por sus calles.


Aquí te cuento mis lugares favoritos, los platos típicos que no puedes dejar de probar y las zonas que esconden algunos de los secretos gastronómicos mejor guardados de la ciudad. Porque comer bien en París sin arruinarte no solo es posible, es un verdadero arte.

Restaurantes de París


Pastamore



Uno de los lugares donde comer en París barato y rico, especialmente si buscas comida italiana en un ambiente desenfadado. Ideal para una cena relajada tras un día de turismo.


Bistrot Instint



Un sitio acogedor con platos del día a buen precio. Aquí encontré esa combinación rara: comida bien elaborada, ambiente íntimo y una cuenta que no te hace sudar frío.


Condesa París



Alta cocina a precios accesibles en pleno centro. Perfecto para una experiencia gastronómica más sofisticada sin tener que hipotecar tu tarjeta.


Le Comptoir Boutary



Uno de esos lugares que parecen caros por fuera, pero sorprenden con menús de mediodía ajustados. Me sirvieron un boeuf bourguignon memorable.


Sanukiya



Si te apetece comida japonesa auténtica, este es tu sitio. Probé unos udon que me devolvieron el alma al cuerpo tras horas caminando.


Pur-Jean-François Rouquette



Una opción más refinada, pero si pillas el menú del almuerzo, puedes darte un capricho a precio razonable. La presentación es impecable y el sabor también.


Zincou Vins Tapes



Tapas francesas con un toque moderno. Aquí entendí que no hace falta gastar mucho para comer como rey. Compartimos varios platos con vino y salimos felices.


Perception



Moderno y minimalista. Perfecto si buscas algo diferente. La carta cambia con frecuencia y eso lo hace aún más atractivo.


BAO&ME



Comida callejera asiática con mucho sabor. Económico, rápido y lleno de locales, lo cual siempre es buena señal.


Zen



Una joya escondida para los amantes del sushi. No es lo más barato, pero si buscas calidad sin caer en sitios turísticos, vale cada euro.

Platos típicos de París


Foie gras



Un clásico de la cocina francesa. Lo probé en un mercado local y la textura era tan suave como mantequilla.


Boeuf bourguignon



Estofado de ternera al vino. Uno de esos platos que te reconcilian con la vida después de un día largo. En Le Comptoir Boutary lo bordan.


Escargots



Sí, caracoles. Los probé por primera vez en Chez Gladines y, para mi sorpresa, ¡me encantaron! Con mantequilla y ajo, son un manjar.


Croque monsieur



El sándwich parisino por excelencia. Ideal para un almuerzo rápido sin sacrificar sabor.


Quiche lorraine



Un trozo de cielo salado. Lo compré en una boulangerie cerca de République y lo disfruté en el Jardín de Luxemburgo.


Fromage



El queso en París es religión. Rue Mouffetard tiene algunos de los mejores quesos que he olido en mi vida.


Coq au vin



Pollo al vino, reconfortante y sabroso. Lo probé en un restaurante local sin nombre pero con mucha alma.


Pot-au-feu



Un guiso tradicional y contundente. Perfecto para los días fríos. Barato y nutritivo.


Brioche


e


Ideal para el desayuno. La de Boulangerie Utopie me hizo parar en seco: dorada, crujiente, con ese aroma a mantequilla irresistible.


Tarte tatin



Tarta de manzana invertida. Dulce, jugosa y con masa crujiente. Un postre que no puedes dejar de probar.


Crepe



Dulces o saladas, las crepes son una forma barata y deliciosa de llenar el estómago en París.


Ratatouille



Verduras guisadas al estilo provenzal. Saludable y sabroso, lo comí en un pequeño bistrot lleno de locales.

Zonas para comer


Barrio Latino



Aquí viví una de mis mejores experiencias gastronómicas en París: Chez Gladines, donde comí una salade landaise con pato confitado. El ambiente es informal, los precios justos y la comida reconfortante.


Montmartre



Una zona bohemia donde, si evitas los restaurantes turísticos, puedes encontrar auténticas joyas. Probé un croque monsieur increíble en una panadería escondida.


Torre Eiffel



Puede parecer una zona cara, pero si te alejas unas pocas calles, hay opciones asequibles. Mi favorito: comprar comida en Rue Cler y hacer un picnic con vista a la torre. Una experiencia impagable.

Experiencias en París