Tarta Tatin

La tarta Tatin es una tarta francesa de manzana caramelizada cocida al revés. Es decir, primero se cuecen las manzanas con mantequilla y azúcar, y luego se cubren con masa (hojaldre o quebrada) antes de hornearse. Al desmoldarse, las manzanas quedan en la parte superior, brillantes y doradas por el caramelo.


Su origen es accidental: las hermanas Tatin, en Lamotte-Beuvron, olvidaron colocar la masa debajo de las manzanas y decidieron hornearla encima. El resultado fue tan exquisito que se convirtió en un clásico instantáneo.


Ingredientes para una tarta Tatin perfecta


6588_tarte_tatin_(3).webp (800×600)


  • 6 manzanas tipo Golden o Reineta
  • 100 g de mantequilla
  • 120 g de azúcar
  • Masa quebrada o hojaldre
  • Canela o vainilla (opcional)


Cómo hacer tarta Tatin paso a paso


6592_tarte_tatin_(2).webp (800×600)


  1. Pela y corta las manzanas en mitades o cuartos.
  2. En una sartén o molde apto para horno, derrite la mantequilla con el azúcar hasta obtener un caramelo rubio.
  3. Coloca las manzanas encima del caramelo y cocina a fuego lento 15-20 minutos.
  4. Cubre con la masa y dobla los bordes hacia adentro.
  5. Hornea a 180ºC durante 25-30 minutos.
  6. Desmolda en caliente con cuidado para que el caramelo no se solidifique.


El corazón de la repostería francesa


6557_tarte_tatin.webp (800×600)


La tarta Tatin no es solo un postre: es una lección de humildad gastronómica. Nació de un error, pero su sabor ha conquistado paladares por generaciones. La combinación de manzana ácida, caramelo profundo y masa crujiente es insuperable cuando se hace con paciencia y buenos ingredientes.


La primera vez que probé una tarte Tatin fue en Lamotte-Beuvron, el lugar donde se originó. Entré al hotel Tatin, temblando de frío y con el alma abierta. Pedí un café y una tarta sin mirar la carta.


Tardaron unos minutos. Los justos. Porque cuando llegó, entendí que había valido la pena cada kilómetro.


Variaciones de la tarta Tatin


  • Tatin de peras o higos: manteniendo el caramelo pero con otras frutas.
  • Tatin saladas: con tomates cherry, cebollas o berenjenas.
  • Mini tatins: versiones individuales para servir en eventos o picnics.


La tarta era pequeña, servida tibia, con las manzanas doradas y brillantes, como si estuvieran barnizadas con caramelo de infancia. Al cortarla, el cuchillo atravesó capas: primero una capa de fruta jugosa y firme, luego una masa quebrada que crujía con ese sonido que sólo hace lo bien hecho.


Consejos para una Tatin inolvidable


6560_tarte_tatin_(1).webp (800×600)


  • Usa manzanas firmes que no se deshagan.
  • No remuevas el caramelo una vez empiece a dorarse.
  • Desmolda en caliente con precaución.
  • Acompáñala con crema fresca o helado de vainilla para contraste.


El primer bocado fue como entrar en un recuerdo que no era mío, pero que me resultaba familiar. Las manzanas tenían ese punto exacto entre ácido y dulce, y el caramelo... ay, el caramelo: profundo, casi tostado, como si llevara una historia cocinándose a fuego lento.


Por qué debes probarla en su lugar de origen


En Lamotte-Beuvron, todo tiene otro sabor. La historia está impregnada en las paredes del hotel Tatin, en cada cucharada. Desde entonces, la tarte Tatin es mi símbolo de que los errores, a veces, dan lugar a las cosas más hermosas.


Si alguna vez te pierdes por el Valle del Loira, haz una parada en Lamotte-Beuvron. Entra sin prisas, pide una tarte Tatin, y deja que el error más famoso de la pastelería francesa te endulce el alma.

Experiencias en París