Primavera y otoño

Primavera y otoño: las mejores estaciones para visitar Segovia


Si estás planeando un viaje a Segovia y te preguntas cuál es el mejor momento para ir, la respuesta es clara: primavera (abril-junio) y otoño (septiembre-octubre) son las épocas ideales para conocer la ciudad en su máximo esplendor.


Primavera en Segovia


Durante los meses de abril, mayo y junio, Segovia se llena de color. Los jardines del Alcázar, los paseos del Eresma y los parques junto a la muralla florecen, el clima es agradable —con temperaturas entre 15 °C y 25 °C— y la ciudad aún no está tan abarrotada como en verano.

Es también una temporada con mucha actividad cultural: Semana Santa, Titirimundi y varios eventos musicales marcan la agenda.


Ventajas de viajar en primavera:


  • Clima templado y luminoso
  • Ideal para hacer excursiones cercanas (La Granja, Hoces del Duratón)
  • Buena disponibilidad hotelera entre semana
  • Eventos culturales en auge


Otoño en Segovia


Septiembre y octubre traen consigo paisajes de postal: los árboles del valle del Eresma se tiñen de ocres y dorados, el aire es fresco pero no frío, y el ritmo turístico baja notablemente.

Es el momento perfecto para recorrer el casco histórico con calma, subir a miradores sin agobios y disfrutar de platos tradicionales como los judiones o el cochinillo asado en un ambiente más local.


Ventajas de viajar en otoño:


  • Menor afluencia turística
  • Atardeceres espectaculares desde el Alcázar
  • Clima ideal para caminar sin calor
  • San Frutos, patrón de la ciudad, se celebra el 25 de octubre


-Consejo viajero: En ambas estaciones, lleva ropa en capas. Las mañanas y noches pueden ser frías, pero a mediodía el sol calienta bastante. Consulta también el calendario cultural: muchos eventos son gratuitos y enriquecen la experiencia.

Experiencias en Segovia