Antonio Machado

Antonio Machado en Segovia


La relación entre Antonio Machado y Segovia es una de esas historias discretas pero intensas que marcan el carácter de una ciudad. El célebre poeta sevillano vivió y trabajó en Segovia entre 1919 y 1932, un periodo crucial tanto en su vida como en la vida cultural de la ciudad.

Machado llegó a Segovia para ocupar una plaza como catedrático de Gramática Francesa en el Instituto General y Técnico, ubicado entonces en el antiguo palacio de Enrique IV (hoy sede de la Universidad SEK). Se instaló en una pensión modesta en la Calle de los Desamparados, donde residió durante trece años. Esa misma pensión es hoy la Casa-Museo de Antonio Machado, un rincón cargado de melancolía, con muebles originales, recuerdos personales y manuscritos del poeta.

Durante su estancia en Segovia, Machado desarrolló una intensa vida intelectual. Participó activamente en la creación de la Universidad Popular Segoviana, un proyecto pedagógico innovador que ofrecía clases gratuitas a trabajadores. También fue un firme defensor de la Segunda República, y se implicó en debates culturales y sociales que marcaron la década de 1930.

En sus escritos, Segovia aparece como un lugar de contemplación y compromiso. El silencio de sus calles, la sobriedad castellana y la historia que rezuma cada piedra inspiraron algunos de sus poemas más serenos y reflexivos. Aunque no es la ciudad que más aparece en su obra, sí fue quizás la que más le permitió vivir como poeta y como ciudadano.


Consejo viajero: La visita a la Casa-Museo de Antonio Machado es una de las más íntimas y emotivas que puedes hacer en Segovia. Su sencillez transmite la esencia del poeta. No olvides pasar por el aula del antiguo instituto, también conservada, y por el mural con sus versos en la calle.

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